Siguiente: Igual y Secreto Superior: Voto Electr�nico y Software Anterior: Libre |
La palabra Directo conlleva
Se plantea el problema de la Autentificaci�n del voto y del votante. Debemos garantizar que quien vota es quien dice ser, que no existen problemas de "suplantaci�n de personalidad", y que cuando el votante ejerce su derecho, �ste se lleva a cabo.
En lenguaje inform�tico tenemos cuatro problemas diferenciados:
Dejaremos el �ltimo punto para el pr�ximo cap�tulo. Los tres primeros corresponden a los conocidos problemas de certificaci�n, comunes en los sistemas de comercio electr�nico. Tenemos diversas alternativas:
Diferenciamos estos dos procesos porque corresponden a operaciones
distintas. En la primera el usuario se identifica ante la base
de datos. Corresponde al punto de acceso al sistema. El segundo
caso es cuando el votante quiere ejercer su derecho al voto y as� lo
manifiesta: el sistema le proporciona medios adicionales para ello.
Uno puede preguntarse la necesidad de esta disociaci�n. Tiene dos
motivos: El primero es de organizaci�n. Son operaciones diferenciadas.
El segundo es de seguridad adicional: es perfectamente posible que el
sistema mantenga diversas consultas simult�neas, y debe independizarse
en lo posible cada una de ellas, de manera que el votante expresamente
decida d�nde, como y cuando participar en cada una de ellas (
recordemos el principio de libertad )
Casi todos los sistemas de consulta electr�nica existentes en la actualidad est�n basados en el uso de cookies. No son v�lidos mas que para encuestas, sondeos de opini�n, etc. Unos pocos se basan en sistemas de claves, pero s�lo para autentificar al votante. El programa desarrollado por el autor lleva el sistema de doble clave para identificaci�n y derecho al voto.
Las claves se comunican al usuario mediante correo electr�nico. En funci�n del sistema se utilizaran o no mensajes encriptados, siendo com�n el uso de PGP para su encriptaci�n
No he encontrado todav�a ning�n sistema de voto electr�nico que utilize sistemas de certificaci�n electr�nica. Realmente deber�a ser un requisito imprescindible para un sistema de voto, pues es el �nico capaz de certificar y autentificar completamente a un usuario.
Hay que tener en cuenta que el voto electr�nico es una suerte de transacci�n electr�nica. La legislaci�n espa�ola contempla el uso de firmas y certificados digitales, por lo que un sistema basado en �stas ser�a completamente v�lido y legal.
Como resultado de �ste an�lisis, tenemos ahora tambi�n un sistema basado en certificados digitales, con realimentaci�n al usuario mediante correo electr�nico encriptado, y con sistemas de doble clave para registro y emisi�n de voto.... Los lectores que hayan hecho la Declaraci�n de la Renta 1999 por Internet sabr�n del engorro que significa el procedimiento de obtenci�n de certificados digitales.... y sin embargo no es sino lo que hacemos cuando presentamos el Documento de Identidad ante la mesa electoral: garantizar que somos nosotros y no otro quien vota. La normativa Espa�ola es de las m�s avanzadas de Europa en cuanto aceptaci�n de firmas digitales, siendo de las pocas que permite que ciertos tr�mites administrativos puedan realizarse a trav�s del Web. En este caso, el voto viene a ser un tr�mite m�s.
La figura ilustra un esquema de autentificaci�n basado en certificaci�n digital. B�sicamente los pasos son: