No hace tanto tiempo que pensar en una red de ordenadores era poco menos que un sue�o. Est�bamos tan bien con nuestra computadora personal o laboral, �ramos capaces -cre�amos- de procesar texto, manej�bamos nuestras bases de datos, imprim�amos vistosos carteles ah�tos de alardes tipogr�ficos,... en fin. Hoy d�a, en cambio, no se concibe una computadora aislada. La m�s modesta dispone de un artefacto capaz de comunicarse con otras a trav�s del hilo telef�nico. Hoy en d�a tenemos que estar en red.
Consideraremos una red como un conjunto de ordenadores capaces de comunicarse entre s�, bien directamente, bien a trav�s de otros.[1] Como en toda comunicaci�n, para que �sta sea posible, necesitamos un idioma que sea comprendido por todos los integrantes, en este caso, los ordenadores de la red. En este contexto el idioma es el protocolo de comunicaci�n
[1] | Para ser precisos deber�amos decir que una red es un conjunto de nodos ya que �stos no tienen que ser necesariamente ordenadores tal y como los concebimos, pueden ser -de hecho as� ocurre en muchas ocasiones- simplemente terminales sin disco o impresoras inteligentes. |